Cuidar tu piel en verano es crucial, puesto que es el órgano más grande de nuestro cuerpo y no siempre la cuidamos como debe. Es especialmente importante hacerlo en momentos como el verano donde la incidencia de los rayos UV sobre nuestra dermis es mucho mayor. A continuación, te damos una serie de consejos que te permitirán cuidar tu piel como necesita en los meses de más calor y reducir la cantidad de daño solar sobre la piel.
Consejos para cuidar tu piel en verano
Limpia tu piel
El primer paso para tener una piel sana es hacer, cuando corresponde, la limpieza necesaria, para lo cual lo principal y necesario es conocer tu piel. Esto es así porque cualquier tipo de tratamiento que se aplique después podrá penetrar de manera correcta sobre las diferentes capas de la dermis y, por tanto, su efecto será mayor.
Para ello, siempre es importante recurrir al uso de productos limpiadores que sean suaves, pero capaces de acabar con la suciedad a la vez que no alteran el manto ácido de la piel.
Hidratación
Mantener una piel hidratada es siempre crucial, pero cobra especial relevancia en los meses de verano. La hidratación de la dermis se debe de hacer tanto de manera externa como interna.
Por un lado, hay que asegurarse de beber la cantidad de agua recomendada al día para que, entre otros aspectos, la hidratación en la piel se mantenga en niveles adecuados y no acabe luciendo un aspecto seco.
También hay que ayudarse con la hidratación externa mediante el uso de cremas hidratantes tanto a nivel corporal como facial, y recurrir para la limpieza de la piel al uso de jabones syndet, opciones de jabón u oleogeles de ducha que respetan más el pH y que buscan no alterar la superficie cutánea, de tal modo que el agua se sigue manteniendo en el interior de la piel. Además, puedes aplicar un tratamiento de mesoterapia facial, para conseguir una hidratación profunda de la piel.
La correcta protección solar
A menudo se cae en el error de poner protección solar solo cuando se va a la playa y a la piscina. Si bien, lo cierto es que en los meses de calor es importante aplicarla a diario, independientemente de la actividad que se vaya a realizar. De ahí la importancia de usar protectores solares a diario. Aunque en las pieles más morenas es posible que con un factor más bajo sea suficiente, lo cierto es que para garantizar una protección óptima lo más recomendable es optar por el factor 50 y aplicarla cada cierto tiempo. No solo conseguiremos regular tu piel y conseguir un moreno de forma regulada, conjunto con una reducción de las posibilidades de sufrir melanomas y problemas derivados, también una menor cantidad y de tamaño, de las manchas solares faciales de verano.
Cuidado con el sol
Aún con la aplicación de protector solar es fundamental que tengas cuidado con el sol y nunca lo tomes con maquillaje, perfumes, o tras una sesión de depilación, porque se te puede manchar la piel y te perjudicarán para mantener una piel sana. Del mismo modo, debes evitar hacer una exposición prolongada en las horas en las que los rayos del sol son más perjudiciales, de 12 a 17 horas, aproximadamente. Si has sufrido los efectos del sol y han quedado machas en tu piel, puedes revertir este problema. Gracias al tratamiento Dermapen en Valencia de la Doctora Milotich, conseguiremos eliminar las manchas que el sol deja en tu piel.
La exposición prolongada, así como los cambios de temperatura fuertes, pueden potenciar la aparición de vasodilataciones en la piel, lo que provoca rojeces en la cara, la cuperosis facial. Para reducir la posibilidad de aparición, es importante que emplees una correcta protección e hidratación cutánea.
Retira el cloro de tu piel
Cuando sales de la piscina es fundamental que te duches como lo haces antes de entrar. Aquí lo que se busca es eliminar gran parte del cloro que haya podido quedar en tu piel y también enjuagar en este sentido el cabello que también se puede ver afectado por los efectos del cloro.
Es importante porque el cloro se adhiere fácilmente tanto al cuero cabelludo como a la piel y si no se retira bien incluso puede acabar generando algo de olor. Ducharse antes de entrar a la piscina es una medida higiénica que se ha de seguir siempre, pero que, además, será positiva para tu dermis porque evitará que si tenías algún tipo de crema en la piel se produzca alguna reacción al entrar en contacto con el cloro.
Del mismo modo, si buscas proteger tu pelo del cloro, lo mejor será recurrir al uso de un gorro de piscina. Puede ser engorroso, pero así evitarás que se estropee o reseque, teniendo especial cuidado las personas con el pelo teñido, puesto que es a ellas a las que el cloro puede afectarles más negativamente.
La vitamina C, gran aliada
Si hay una vitamina que necesita tu piel es la C. Aunque precisamente a través del sol la piel obtiene ciertas dosis, no está de más que tras la sesión de piscina o de playa recurras al uso de un sérum de vitamina C. Para aplicarlo tendrás que tener la piel limpia y así lograrás disfrutar del efecto reparador y reafirmante que te proporcionará sobre la dermis además de ganar en luminosidad.
Apostar por una dieta rica en vitaminas, del mismo modo que es importante, como decimos, tomar precauciones a nivel externo también lo es hacerlo a través de la alimentación. Beber una cantidad adecuada de agua y seguir una dieta rica en vitaminas será fundamental para el cuidado de la piel, nutriendo esta y reduciendo la posibilidad de sufrir manchas solares y tener que eliminarlas. Precisamente en verano un buen modo de lograrlo es mediante la ingesta de batidos detox en los que alimentos como la zanahoria o el pepino sean algunos de los ingredientes a usar.
Conclusiones
El sol aporta grandes beneficios para la piel, pero debemos ser conscientes de los peligros que entraña la exposición descontrolada al sol. Por ello, debemos protegernos correctamente en todo momento para disfrutar de forma saludable de todos los beneficios que tiene para nosotros. Si has sufrido algún problema debido a la exposición solar o te ha generado manchas en la piel, puedes recuperar el estado saludable de la misma gracias a un tratamiento de rejuvenecimiento facial sin cirugía o a través de los diferentes tratamientos para la cara que tenemos a tu disposición. Esta es una gran forma de conseguir que tu luz recupere su tersura, luminosidad e hidratación de forma no invasiva y sin tener que pasar por quirófano.